Puede que en algún momento de la vida de tu mascota se requiera una cirugía debido a una enfermedad o traumatismo. Este proceso puede generar estrés tanto para ti como para tu fiel compañero. Sin embargo, con algunos consejos adecuados, podemos hacer que la experiencia sea menos complicada y ayudar a que tu mascota se recupere rápidamente. En este artículo, te proporcionaremos información sobre los cuidados pre y post operatorios que debes tener en cuenta para garantizar la salud y el bienestar de tu querida mascota.
Cuidados pre-cirugía: Antes de la operación, es importante que el veterinario realice un chequeo exhaustivo para detectar cualquier enfermedad preexistente que pueda interferir en el procedimiento quirúrgico. Además, asegúrate de que tu mascota esté al día con sus vacunas, ya que esto contribuirá a fortalecer su sistema inmunológico. Por otro lado, el veterinario te indicará el momento adecuado para suspender la alimentación y el suministro de agua antes de la cirugía. Sigue sus instrucciones al pie de la letra para garantizar la seguridad de tu mascota durante el procedimiento.
Cuidados post-cirugía: Después de la operación, tu mascota estará debilitada y posiblemente mareada, por lo que es crucial que evites que se emocione o excite demasiado.
- Para transportarla de manera segura, utiliza un transportín adecuado o una correa para mantener un control adecuado sobre ella.
- Limita el ejercicio físico de tu mascota, ya que realizar demasiada actividad podría abrir las heridas y retrasar su recuperación.
- Asegúrate de que su cama esté limpia y libre de cualquier tipo de infección. Si se requiere la administración de medicamentos, sigue rigurosamente las indicaciones del veterinario para garantizar una correcta dosificación y tratamiento.
- Es fundamental que revises la herida de tu mascota a diario y estés atento a cualquier signo de irritación. En caso de detectar alguna anomalía, como enrojecimiento o inflamación, comunícate de inmediato con tu veterinario para obtener asesoramiento profesional
- Para evitar que tu mascota se lama o muerda la herida, puedes utilizar un “collar isabelino” o un dispositivo similar que impida el acceso a la zona de la operación.
La cirugía es una situación estresante tanto para los dueños como para las mascotas, pero al seguir estos consejos, puedes facilitar el proceso y contribuir a una pronta recuperación de tu querida compañera. Asegúrate de seguir las indicaciones del veterinario, mantener un entorno limpio y seguro, y estar atento a cualquier cambio en la herida de tu mascota. Recuerda que el cuidado y la atención que brindes durante los cuidados pre y post operatorios marcarán la diferencia en el proceso de recuperación de tu mascota.
Con los cuidados adecuados antes y después de la cirugía, podrás brindar a tu mascota el apoyo necesario para una pronta y exitosa recuperación”.
